El Mayor Fracaso de la Ciencia (y por qué deberías alegrarte) 🤯
Descubre por qué la ciencia moderna ha fracasado en explicar nuestra experiencia subjetiva y cómo este aparente fracaso podría ser el inicio de una revolución
Tu cerebro pesa alrededor de 1.500 kilogramos. Es un dato muy científico.
Pero...
¿Cuánto pesa el amor de una madre por su hijo? ¿Qué unidad de medida usarías para cuantificar el dolor de perder a alguien que amas? ¿En qué escala podríamos medir la belleza de un amanecer?
Esta simple paradoja esconde el fracaso más espectacular de la ciencia moderna:
La ciencia moderna ha fracasado estrepitosamente en explicar nuestra experiencia subjetiva del mundo
Hemos construido telescopios que pueden ver el nacimiento de galaxias a miles de millones de años luz, pero somos incapaces de medir las experiencias más fundamentales de nuestra existencia.
Y este no es un simple problema filosófico. Es una crisis que está transformando radicalmente nuestra forma de entender (y vivir) la realidad...
Déjame contarte la historia que ejemplifica este fracaso:
Durante siglos, los humanos hemos experimentado el calor y el frío de manera directa y personal. Algunos tiemblan con 18 grados mientras otros van en manga corta.
Esta percepción subjetiva de la temperatura es muy útil a nivel individual, pero nos complica la vida si queremos entender el mundo.
Entonces llegó la ciencia y dijo: "Vamos a medir esto objetivamente".
Creamos el termómetro ¡Y nos fue increíblemente útil!:
Aprendimos a que temperatura se congela el agua
Hemos llegado a desarrollar modelos que predicen el clima…
Pero, sin darnos cuenta, algo oscuro sucedió: empezamos a creer que la temperatura que nos indicaba el termómetro era más "real" que nuestra propia experiencia del calor o el frío.
Y ahora consultamos el móvil para decidir si ponernos una chaqueta, ignorando completamente lo que nuestro propio cuerpo nos está diciendo. ¡Hemos subcontratado nuestras sensaciones a un termómetro!
Este es un ejemplo perfecto de cómo la ciencia, en su búsqueda de la objetividad, ha ido sustituyendo nuestra experiencia directa del mundo por números y abstracciones.
Y aquí es donde empiezan los problemas.
Las Grandes Limitaciones de la Ciencia Moderna
1. El reduccionismo:
La ciencia moderna tiene una obsesión: descomponer todo en sus partes más pequeñas. Cómo si desmontáramos un juguete para ver cómo funciona:
Nuestro cuerpo → células → proteínas → átomos → quarks
Esta cadena de reducción parece lógica y elegante. El problema es que al desmontar el juguete, perdemos algo esencial: la magia de jugar con él.
El reduccionismo nos ha llevado a creer que si entendemos cada átomo y cada molécula, entenderemos la vida, la consciencia y hasta el amor. Pero la realidad es más compleja: algunas propiedades solo emergen cuando los elementos interactúan entre sí.
La magia de escuchar una sinfonía de Mozart no está en analizar las notas individuales del pentagrama sino de escucharla en su totalidad.
2. La ilusión de la objetividad
Imagina que intentas describir cómo sabe una naranja sin mencionar tu experiencia personal del sabor.
Imposible, ¿verdad?
La ciencia moderna pretende observar el mundo desde ninguna parte, como si pudiéramos desprendernos de nuestra propia experiencia.
Esta búsqueda obsesiva de la objetividad nos ha llevado a desconfiar de nuestra experiencia directa del mundo. Hemos llegado al punto de creer que un escáner cerebral nos dice más sobre nuestras emociones que nuestra propia experiencia de sentirlas.
Lo curioso del caso es que la propia ciencia tiene como principio fundamental la subjetividad. Se llama “el principio de indeterminación de Heisenberg” y nos dice que, en mecánica cuántica, el simple hecho de observar una partícula altera sus propiedades.
Este principio, bien conocido, ha sido bastante ignorado por los físicos, ya que es incómodo y nos limita en nuestra búsqueda de conocimiento.
3. El Triunfalismo Científico
Aquí llegamos al problema más preocupante de todos: Hemos desarrollado una creencia casi religiosa de que solo es "real" aquello que puede medirse, cuantificarse y representarse en gráficas y ecuaciones.
Es como si tuviéramos dos niveles de realidad:
🔬 Lo que medimos
💭 Lo que experimentamos
La ciencia actual solo se centra en el primer nivel, ignorando la riqueza de la segunda.
Según esta visión, tu experiencia del amor no es más que una serie de reacciones químicas en tu cerebro. La belleza de un atardecer se reduce a longitudes de onda de luz. Y tu consciencia... bueno, eso es solo una "ilusión" creada por la actividad neuronal.
Si la ciencia ignora algo tan básico como nuestra experiencia del calor y el frío…
¿Qué otras experiencias fundamentales se nos están escapando?
Y ¿Cómo estamos “rellenando” este vacio?
Pues muy mal…
Cómo nos enfrentamos a lo que la ciencia ignora
1. La respuesta de rechazo: Conspiración y Pseudociéncia
Una parte de la sociedad ha optado por el camino del negacionismo científico.
"Si la ciencia no puede explicar mi experiencia subjetiva, entonces la ciencia está equivocada"
Este grupo suele abrazar explicaciones pseudocientíficas y teorías conspirativas, buscando en ellas el significado que la ciencia pura no les proporciona.
Sus mensajes son del estilo: “todo es mentida”, “el gobierno te está engañando”, “el cambio climático no es real “ o el famosísimo “a mi me ha funcionado”…
Empezó siendo un movimiento de extrema derecha, pero cada vez es más “main stream”. De hecho Donal Trump usa este tipo de mensaje y le ha valido para ganar las elecciones.
También es lo que se dedican a hacer todos los “gurús de redes sociales” que, de pasada, te venden sus productos.
2. La respuesta postmoderna: Relativización
Por otro lado, ciertos sectores académicos han adoptado una postura relativista en lo que todo vale:
"La ciencia es solo una narrativa más entre muchas"
Consideran que todo el conocimiento científico es una mera construcción social, ignorando sus evidentes logros y su capacidad para describir y predecir fenómenos naturales muy superior a cualquier otro tipo de estructura de conocimiento.
Detrás de esta visión hay narrativas como la de “el sexo no es biológico, es un constructo social” o la creencia que la efectividad de un antibiótico no es inherentemente superior a un ritual chamánico, sino que ambos son igualmente válidos dentro de sus respectivos marcos culturales ignorando la apabullante evidencia de la efectividad de estas diferentes estrategias.
¿Y Ahora Qué?
Atención: esto no es un manifiesto contra la ciencia.
De hecho, es todo lo contrario: es una invitación a hacer mejor ciencia.
La historia nos ha demostrado que la ciencia es lo mejor que hemos hecho en toda la historia de la humanidad.
Mira sino este gráfico:
¿Sabes que pasó que causó que dejáramos de morirnos a los 30 años?
El descubrimiento de los microbios - y que empezáramos a lavarnos las manos
Los antibióticos - y el fin de las grande plagas
Las vacunas - el mayor éxito de la medicina: prevenir antes de curar
La potabilización del agua - ha prevenido más muertes que ningún otro avance médico
E infinidad de otros descubrimientos científicos.
Pero la ciencia tiene límites.
Necesitamos un nuevo paradigma que integre tanto el rigor científico como la riqueza de la experiencia humana.
🔬 Riguroso en sus mediciones
💭 Respetuoso con la experiencia subjetiva
🤝 Capaz de integrar ambos mundos
No es una tarea fácil, pero es el siguiente paso en la evolución de la ciencia.
La próxima vez que te encuentres reduciendo tu experiencia a números (sea tu peso en la báscula, tus calorías diarias o tus horas de sueño), recuerda: estos datos son útiles, pero son solo una parte de la historia.
Esta reflexión me llevó a un cambio personal: dejé de usar mi anillo "Oura" para medir el sueño. Me di cuenta de que había delegado en un dispositivo la capacidad de saber si había descansado bien, cuando mi cuerpo ya me estaba dando toda esa información. La tecnología se había convertido en un intermediario innecesario entre yo y mi experiencia.
👉 Tu experiencia personal, tus sensaciones y tu intuición también importan.
No se trata de rechazar la ciencia, sino de expandirla para incluir la totalidad de la experiencia humana. Y esta NewsLetter es parte de esta revolución.
Si quieres profundizar en este tema te sugiero que mires la Masterclass que publiqué sobre conocimiento científico y Pseudo Ciencia:
🗣️ Tu turno: ¿Recuerdas alguna vez en que tu experiencia personal contradijo completamente lo que "decían los datos"? ¿Qué hiciste? ¿Le hiciste caso a los números o a tu intuición?
Comparte tu historia en los comentarios 👇
¡Nos vemos la semana que viene!
Oriol Roda
Lo que señalas en el punto uno surge en la Ilustración y ha jugado un papel clave en la separación entre naturaleza y cultura propia de nuestra cultura occidental.
https://youtu.be/5gWGP34-4tY?si=wWejiMp8YiOW7D8E
Saludos desde Montevideo, Uruguay